anzine: abreviatura en inglés de fan magazine, que se podría traducir como "revista para fanáticos". Con esta breve introducción de Wikipedia, que contiene otras definiciones interesantes, empiezo este escrito.
Corrían los años 80 cuando el fenómeno de la informática empezó a llenarse de publicaciones para los ordenadores domésticos. Cada sistema tenía su propia publicación, incluso algunas aglutinaban a varios de estos ordenadores en aquella época maravillosa que para los niños y adultos de aquel entonces podría equivaler al descubrimiento de América o ir a la luna en cohete.
Dichosos devorábamos esas publicaciones (tuvieran mejor o menor calidad) aunque algunas nos impregnasen con sus mentiras interesadas o comentarios inflados en pos de mayores ganancias, algo que entonces ignorábamos por completo. Pero en definitiva todos las esperábamos. Llegaron los 90 y la mayoría de esas publicaciones desaparecieron o se transformaron adaptándose a las nuevas máquinas, cosa que a una gran parte de los niños de aquella época, ya adolescentes, incluso algunos ya algo crecidos, no les interesaba y nos sentíamos solos con nuestros ordenadores abandonados a nuestra suerte.
Fue entonces cuando empezaron a salir los fanzines como setas; un movimiento casi espontaneo para dar apoyo al usuario. Algunos como Hnostar que ya habían empezado su camino incluso antes de que cerrara la MSX-Club, ya habían echado a andar. Recordemos que tampoco nadie tenía un móvil, apenas empezaba a caminar internet y las redes sociales como las conocemos no existían. Al igual que las revistas, algunos de aquellos fanzines tenían más o menos calidad en contenido y maquetación, pero todos tenían un denominador en común: el entusiasmo y la ilusión. Todas esas publicaciones junto a la realización de los primeros encuentros fueron (permitidme una expresión en mi otra lengua) “el pal de paller” (algo así como un pilar) de los usuarios, ya que se creó una infraestructura que había desaparecido. Más rudimentaria, tosca y algo arcaica si queréis decirlo, pero funcional al 100% que era lo que se necesitaba. Los fanzines eran: Hnostar, MSX Journal, FKD-Fan, Nihongo, Nexus BCN, MSX Spirit, Lehenak, MOAI-TECH, SD Mesxes, Call MSX , MSX Area (más tardíamente) y algunas otras extranjeras que ya por aquel entonces importábamos de Holanda, Japón o Italia. La mayoría ya están extintas salvo MSX-Area (que si nada lo remedia nos dirá adiós), y nosotros mismos que decidimos hace años transmutarnos a webzine o dicho más técnicamente a Ezine.
También existe alguna otra publicación foránea actualmente como MSX Clube de Brasil que está en su quinto número, pero en cuanto se refiere a producción nacional en papel en exclusiva a sistemas antiguos, se acabó lo que se daba. Con MSX Area si se despiden, se cierra una época maravillosa en la que ojear un fanzine estaba a la altura de ponerte delante de tu MSX y jugar a un juego. De hecho, muchas veces jugábamos y teníamos la publicación a nuestro lado para seguir una guía de cómo jugar o terminar un juego o usar un truco, o simplemente probar ese juego que nos indicaba la publicación.
Todo tiene un principio y un fin. Hoy día ante el imparable avance de lo tecnológico y de nuestras edades, todo esto prácticamente ha desaparecido. El “pal de paller” ahora es internet ya que ni los encuentros de usuarios son aquella cita de antaño con el usuario para descubrir novedades y escuchar noticias. Por eso y otras razones, nosotros mismos decidimos adaptarnos aunque nos pesara a los nuevos tiempos.
Mi más sincero y eterno agradecimiento a todas aquellas personas que se tomaron las molestias en seguir ilusionándonos dando respuesta a la falta de medios de prensa y a los que continuaron durante un tiempo ante la avalancha de internet.
