Bienvenidos a Isla Pescatore, ¡paraíso de la pesca con caña! Así nos da la bienvenida este juego lanzado en 2024 por el grupo Kamino. ¿Y quién hay detrás de Kamino que por si no lo habías notado es un guiño a...? Pues tenemos nada menos que a Néstor Sancho, programador entre otros juegos de Steve Dore, también en el apartado gráfico y conceptual a Igor Errazking (King Errazking) que además de MSX ha participado en títulos de Commore 64 como Mazinger Z (juego muy bueno), y por último y no menos importante en el apartado sonoro, GreenWebSevilla.


MSX Y LA PESCA

En MSX hay géneros que están repetidos hasta la saciedad, pero sin en cambio, otros géneros tal vez por falta de público o porque en la época no fueron lo suficientemente rentables, no se prodigaron mucho. Sobre juegos deportivos, aunque en MSX tenemos muchísimos de golf y béisbol (deportes en Japón muy importantes), faltan más juegos de fútbol, baloncesto o tenis por ejemplo, por citar algunos. Mencionar que Relevo hizo un excelentísimo juego de snowboard recientemente.

Y el género de pesca que es el que nos ocupa en este artículo no es una excepción. Disponemos de tres títulos que sepamos (ya bastante añejos) hasta la fecha. Hot-B con The Black Bass, se estrenó en este género en 1986 para MSX a la par que hizo sus respectivas versiones para FM-7 y Nec PC8801. Un juego que aparte de estar destinado para el mercado japonés, era bastante primitivo, aunque resultón. Más tarde lo portaría a la Famicom, aunque no aportaría un gran cambio respecto a sus predecesores.

Cross Media de la mano de JVC, hizo dos brutales juegos de pesca que no muchos conocen y que a día de hoy siguen siendo juegazos. Hablamos de la saga Tsurikichi Sanpei, vulgarmente conocido como Fishing Freak. Estos juegos, que están basados en el manga y anime del mismo nombre, tratan sobre un chico aficionado a la pesca, el cual compite con otros pescadores y se enfrenta a pruebas para ver quién es el mejor pescador. Ambos fueron lanzados para MSX2 en formato cartucho.


EL JUEGO

Podemos elegir entre tres pescadores diferentes y tenemos tres modos de juego, elementos acertados para tener una mayor experiencia lúdica. En el modo arcade como indica, es todo lineal. Iremos de zona en zona superando los objetivos que nos sean indicados en cada pantalla hasta superar el juego.

El modo historia, es el más suculento y nos dará horas y horas de diversión. Empezamos pescando en una determinada zona, ya que el acceso a las demás áreas lo tenemos restringido y para acceder a ellas, deberemos ir obteniendo una serie de requisitos tales como ampliar nuestra licencia de pesca y conseguir muchos puntos, ya que es el dinero que nos permitirá ir a la tienda para comprar material de pesca y reponer nuestras existencias (cebos, sedales y plomos).

El modo práctica, servirá para tomarle el pulso al juego antes de pasar a mayores proezas.

El modo más complejo que no difícil es el modo historia, ya que como comentaba, necesitamos pescar sí o sí para acumular puntos y poder reponer nuestras existencias de material logístico, y pagar diferentes licencias para poder acceder a los distintos lugares de Isla Pescatore.

Los tres pescadores que tenemos a disposición para elegir, tienen unas habilidades más desarrolladas que otras, pero todas guardan un equilibrio. Es divertido poder escoger diferentes opciones y probarlas todas.

Cuando empezamos un modo, la pantalla se divide en dos áreas. En la parte superior está el jugador, con una visión del lugar donde vamos a pescar. Arriba del todo se encuentra la puntuación, la barra de tiempo y el high score (puntuación máxima) y más a la derecha nos marca el stage (pantalla actual).

En el área inferior, vemos el fondo marino con todo lujo de detalles, que dependiendo de la zona cambia de aspecto. Es muy bonito ver cómo aparecen y desaparecen los peces, así como el detalle del plomo cuando flota en la superficie, que se ve reflejado en las ondas que emite en la pantalla inferior, o el signo de exclamación del pez (a lo Solid Snake) cuando advierte un cebo. Son detalles de profesionalidad y buen hacer. Más abajo, está el nombre de Kamino y los créditos que tenemos para continuar, que son un total de tres (estos disponibles solo en el modo arcade).

Una vez que elegimos sedal, plomo y cebo, haremos nuestro lanzamiento ajustando la potencia según creamos conveniente. Se recomienda no dormirse eligiendo nuestra configuración, ya que el tiempo no se detiene. A veces, es recomendable que si no ha salido un buen tiro, o vemos que los peces no están por la labor, recojamos el sedal lo más rápido posible y volvamos a lanzar.

En el modo arcade, deberemos superar un reto en cada pantalla que será superar x centímetros de longitud o número de peces. En el caso de la longitud, se sumarán los obtenidos hasta llegar a la cantidad indicada. Conforme vamos completando pantallas, disponemos de fases de bonus en las que nos aparece un simpático pingüino y nos dice que exageremos nuestra pesca. El pingüino realiza una cuenta atrás, y deberemos pulsar el botón de lanzar tantas veces como podamos para abrir las manos, exagerando lo máximo posible el tamaño de nuestro pez. Una vez finalice el tiempo, según el tamaño que hayamos podido obtener, recibiremos un determinado número de puntos.

En el modo historia, somos recibidos por un cocodrilo que nos da la bienvenida, y nos dice que la temporada de pesca está a punto de empezar. Compramos la licencia, y recibimos un set para principiantes que deberemos aumentar y reponer para poder tener éxito. Después de esto, se nos comunica que nuestra licencia solo nos permite pescar en el área del río. Nos avisa de que no nos arriesguemos a pescar en otras áreas no permitidas, y amablemente nos entrega un mapa de la isla, además de recordarnos que la tienda solo abre mañanas y tardes. Una vez se nos acabe el tiempo y con puntos obtenidos, podremos volver a la tienda y reabastecernos siempre que no sea de noche, ya que la tienda estará cerrada. Seguiremos pescando en la zona del río, hasta que acumulemos los suficientes puntos para poder subir de categoría en nuestra licencia, y pasar por fin a diferentes puntos de la isla.

Trucho alberga y ofrece muchos más detalles de los explicados en este breve repaso. Para mí, es un juego de una grandísima calidad. Gráficamente demuestra una vez más, que aunque sea un juego para la primera generación, puede ser sobresaliente y mostrar gráficos con todo lujo de detalles que en este caso lo hacen muy realista, por cómo está planteado y ejecutado en un 8 bits. Esto no serviría de nada sin un buen sistema de juego, cosa que Trucho también lo tiene.

La música no es espectacular pero acompaña muy bien, aunque tal vez un poco justa de volumen. Los FX son correctos y bien pensados. El que me gusta mucho, es el que suena cuando recogemos con el carrete, porque lo han clavado a la perfección. En resumen, ¡jugabilidad a prueba de bombas! Y el packaging tipo Hal, digno de mención también por el formato de caja, pero con un sublime guiño a Konami igual que pasaba con Relevo´s Snow Boarding.

Trucho es muy chulo y no os voy a contar más, salvo que tiene un ridículo precio de venta en la web de Manuel Pazos. Y que si hubiera sido lanzado en su día por Konami, muchos coleccionistas se sacarían los ojos por tener una unidad.